El espectro gastronómico del Casanare se distingue por sus variadas preparaciones cárnicas que forman parte integral del menú local. Sin embargo, el plato estrella y el más reconocido a nivel nacional es la ternera o mamona. En la región también es posible deleitarse con otros platos como mojarra y cachama, bastimento, sancocho de gallina, pan de arroz, fiambres y hayacas envueltos en hoja, y cocidos, que reflejan la influencia cundiboyacense. Además, el maíz protagoniza diversas preparaciones, como los envueltos.

No se puede olvidar la relevancia de las frutas en la gastronomía casanareña. Mango, naranja, piña, banano, aguacate, joba, papaya, patilla, guanábana, guayaba y limón se añaden a la abundante lista de productos que dan vida a la carta culinaria del piedemonte. En resumen, la gastronomía de Casanare es una auténtica representación de su territorio, rica en sabores y colores que nos hablan de su historia, su cultura y su gente. Para los amantes del pescado, el río ofrece una abundancia de opciones. Uno de los platos más populares es el bagre, un pez de agua dulce que se puede preparar de diversas formas.

El queso de mano con melao es una delicia local que no puedes dejar de probar. Este postre está hecho con queso fresco y una miel de caña, creando una mezcla irresistible de sabores dulces y salados.

Para probar todas estas delicias, hay una serie de restaurantes típicos en Casanare que te ofrecen la oportunidad de saborear la comida tradicional de los Llanos Orientales. El Restaurante La Mamona en Yopal es famoso por su carne a la mamona, el cual ofrece una variedad de platos típicos en un ambiente agradable y acogedor.

En conclusión, la gastronomía de Casanare es un festín de sabores auténticos que reflejan la rica cultura y tradiciones de los Llanos Orientales. Desde los platos de carne y pescado hasta los postres irresistibles, hay algo para todos en Casanare. Así que, si estás planeando un viaje a esta región, prepárate para una experiencia culinaria que no olvidarás.